Conab proyecta cosecha de granos en Brasil en 2023/24 de 312,3 millones de toneladas
Estas condiciones climáticas adversas han afectado el desarrollo de cultivos importantes como la soja y el trigo. Los datos están en el III Encuesta de Cosecha de Cereales 2023/24, divulgado este jueves (7) por la Compañía Nacional de Abastecimiento (Conab).
“Estamos atentos y redoblaremos nuestro seguimiento de las zonas productoras. El comportamiento del clima este año es el factor más determinante para los cultivos que se están sembrando y desarrollando, debido a El Niño. Además, los retrasos en la siembra de soja abren incertidumbre para la segunda cosecha de maíz”, reflexiona el director de Política e Información Agropecuaria de la Conab, Sílvio Porto.
Producto importante para el abastecimiento interno, se espera que el arroz aumente un 7,5% en la cosecha, alcanzando los 10,79 millones de toneladas. El mejor resultado está influenciado por una mayor superficie asignada al producto así como por una recuperación de la productividad. Aun así, el desarrollo del cultivo, especialmente en Rio Grande do Sul, principal estado productor, se ha visto afectado por condiciones climáticas adversas. El exceso de precipitaciones ha generado un exceso de humedad en el suelo, lo que impide completar la siembra y dificulta los tratamientos culturales.
Otro producto tradicional consumido por los brasileños, el frijol presenta escenarios diferentes en los cultivos cultivados en esta primera cosecha en todo el país. En São Paulo, las condiciones generales, hasta el momento, son de buen aspecto fitosanitario. Los efectos de las altas temperaturas y las escasas precipitaciones se mitigaron con el uso de riego. En Minas, este escenario de calor y precipitaciones irregulares tiene impactos en las operaciones de implementación y manejo de cultivos. Aún así, sumadas las 3 cosechas de leguminosas, la expectativa es una producción de 3,1 millones de toneladas.
El clima también ha tenido un impacto en la soja, el principal cultivo del país. La siembra de semillas oleaginosas sigue retrasándose en todas las regiones productoras. En algunos estados, los trabajos para implementar el cultivo fueron cercanos a los de la última cosecha, como Paraná y Mato Grosso. Con la irregularidad climática, hay signos de reducción de la productividad en los estados del centro-oeste. En Mato Grosso, los cultivos todavía mostraron un progreso satisfactorio, incluso con las escasas precipitaciones recibidas. En Goiás, Minas Gerais, Matopiba y Rio Grande do Sul, la superficie sembrada está muy por debajo de lo ocurrido en la cosecha 2022/23. En Rio Grande do Sul se debe al exceso de agua, y en otras regiones a la irregularidad o falta de precipitaciones.
Ante este escenario, la producción de soja estimada en esta cosecha es de 160,2 millones de toneladas. El clima sigue siendo un factor que puede influir en este resultado, especialmente cuando ocurren las etapas de floración y llenado de grano. Los técnicos de la Compañía seguirán siguiendo el desarrollo de los cultivos para verificar el impacto de las condiciones climáticas en el rendimiento final.
Un panorama similar se encuentra para el cultivo de maíz de 1ª cosecha. En las regiones productoras siguen produciéndose fenómenos climáticos extremos, propios de años influenciados por el fenómeno de El Niño, que retrasan la siembra de cereales. En este primer ciclo de cultivo de cereales se proyecta una producción de 25,3 millones de toneladas, una caída del 7,5% respecto a la cosecha anterior. La cosecha total de maíz se estima en 118,53 millones de toneladas.
En los cultivos de invierno se identificó una caída en la productividad en casi todos los productos respecto a la cosecha pasada. En el caso del trigo, principal producto, las fuertes lluvias, los vientos, el granizo, las inundaciones, las intensas nubes y los pocos días soleados dificultan la finalización de la cosecha en Rio Grande do Sul. El volumen de producción se estima en 8,1 millones de toneladas.
Mercado
Los análisis de mercado de los cereales brasileños muestran que las exportaciones de soja, de enero a noviembre de 2023, siguen siendo elevadas. Además, la reserva hasta finales de diciembre se estima en más de 100 millones de toneladas. Ante este escenario, los envíos de granos aumentaron de 98,06 millones de toneladas a 100,03 millones de toneladas. En cuanto a la molienda, se observó una reducción de 350 mil toneladas, impulsada por una disminución en las exportaciones estimadas de harina y aceite de soja.
Para el próximo año, las exportaciones de oleaginosas se estiman en 101,59 millones de toneladas, una reducción de 1,42 millones de toneladas respecto al último relevamiento publicado, influenciada por la actual estimación del volumen a cosechar. También se registró una caída en la trituración, reducida en 1,05 millones de toneladas, debido principalmente a las menores ventas estimadas de harina de soja en el mercado interno en 2024.
En el caso del maíz, la expectativa es que el volumen de las exportaciones brasileñas del cereal en 2024 se reduzca, alcanzando los 38 millones de toneladas. La caída proyectada se debe a la perspectiva de una menor producción nacional combinada con la mayor oferta disponible en el mercado internacional, en medio de la buena cosecha norteamericana.
En el caso del frijol de núcleo común, las perspectivas del mercado son favorables para el productor. La cosecha se encuentra en plena temporada baja y al país sólo le quedan existencias de la tercera cosecha y de las cosechas paulistas en el suministro de nuevos frijoles, al menos hasta mediados de enero de 2024. Con la previsión de una oferta moderada y baja existencias remanentes, la tendencia es que los precios sigan siendo atractivos para los agricultores durante los próximos dos meses.
El mercado del trigo continúa presentando un escenario de precios bajos. El excedente de cereal ruso, con un precio más competitivo que el de otros países, sigue actuando como uno de los principales factores de presión sobre los precios. Además, la mejora del clima en importantes países productores europeos y en Australia también actúa como un factor bajista para los precios. La información proviene de la oficina de prensa de la Conab.
Fuente: safras.com.br